Ryanair vuelve con otra de sus brillantes ideas

Propuestas del Escuadrón 69 a Ryanair para ahorro de costes de operación.

- Uso del lavabo mediante pago: en realidad, esta idea nos lleva a la del tipico bar al cual se desea entrar y no se puede, porque está reservado a clientes. Lo normal es tomar un café o comprar un agua y de este modo poder hacer uso del servicio. En nuestra opinión, lo mejor sería permitir a los señores viajeros el uso de la orina para el sistema de reciclaje de agua, y el de los elementos digamos más "pesados" junto a sus gases, para ser dirigidos a la cámara de combustión de los reactores. Bien es sabido que estos elementos disponen de un poder de encendido enorme, por lo cual se podría lograr un aumento de la velocidad importante. Eso sí, sería conveniente indicar en el billete que se beba y coma abundantemente dos horas antes de tomar el avión.

- Ahorro de combustible: bien es sabido que Ryanair procura que sus pilotos vuelen con el combustible tan justo, que algunos han tenido que echar la gasoliina de sus encendedores en la cámara de combustión para conseguir llevar el avión a tierra. Pero el Escuadrón 69 tiene una idea mejor: los pedales. Efectivamente, los pedales han acompañado al ser humano desde los tiempos de la bicicleta, y, convenientemente acoplados a una hélice trasera propulsora, se podría conseguir un importante ahorro de costes. A todo aquel pasajero que pedalee por encima de una velocidad determinada, se le puede obsequiar con un café descafeinado de sobre o un pedacito de hielo de agua de Lourdes.

- Volar de pie: es increíble cómo otras compañías no lo han pensado antes. Pero no nos quedemos ahí; intentemos usar nuestros conocimientos de ingeniería para ir más allá. Si además de ir de pie, realizamos una presión, suave pero sostenida, sobre el personal, de tal modo que A) cualquier espacio que quede libre sea prensado y de este modo se ahorre espacio, permitiendo la entrada de nuevos viajeros (se acabó el overbooking) y , mediante esta presión, las barras de sujección son innecesarias, ya que toda la materia humana forma una sola masa compacta durante el vuelo, que además es más fácil de calibrar y estabilizar en vuelo. Una prensa de tamaño medio y todo solucionado. Eso sí, se recomienda no aplicar excesiva presión, quizás alguna persona podría llegar a molestarse. Ah, para el tema de ir al lavabo del punto primero, se pueden colocar sondas a los viajeros durante el vuelo. Más gente, y más combustible. Todo un logro.

 - Apoyar la idea de que la tripulación de cabina vuele el avión: efectivamente. Tal como comenta el presidente de Ryanair, el personal de cabina podría echar una mano al comandante en caso de problemas. De hecho, ya sabemos todos que las azafatas echan mano del comandante a la mínima oportunidad, y que la sección delantera de la cabina de mando de los aviones ha visto más sexo que los estudios de cine de Playboy y Penthouse juntos. Un par de tardes sobre cómo aterrizar el avión y la tripulación de cabina estará lista. El E-69 aconseja como vídeo de instrucción la galardonada “Aterriza como puedas”, con un alto valor formativo en el mundo de la aeronáutica comercial. - Eliminar al comandante: una vez eliminado el copiloto, ¿por qué no eliminar al comandante? Lo único que hace el 98% del tiempo es dormir sobre la cabina, tal como indica el Sr. Presidente de Ryanair. Entonces, ¿qué sentido tiene que esté ahí produciendo un gasto importante? Además son unos tipos orgullosos y pretenciosos que lo único que saben hacer es hacerse los figuras con sus trajes azules con las cuatro bandas amarillas. ¡Hay que enseñarles una lección, y hay que hacerlo ya! Sólo hacen que darse un paseo de vez en cuando, ligar con las azafatas, y llevarse un sueldo millonario con el que viven como jeques todo el año. Debe acabarse con esto cuanto antes.

- Eliminar los aeropuertos y sus tasas y gastos: esta idea no sólo tiene como finalidad beneficiar a Ryanair, sino a todas las compañías aéreas. Los costes de operación de un aeropuerto internacional son enormes, por lo que habría que buscar la manera de acabar con ellos. ¿Dónde aterrizarían los aviones? En realidad no es necesario que aterricen. Lo más importante para una compañía es que el avión esté en vuelo siempre. Por lo tanto, los pasajeros deben bajar en paracaídas, y subir mediante retrocohetes colocados convenientemente. Claro que algunos puede que no acierten con la puerta cuando el avión pasa, pero por unas cuantas vidas perdidas no vamos a preocuparnos ahora, pensemos en los puestos de trabajo que conseguiremos con los ahorros asociados a esta idea.

- Eliminar el avión: finalmente, la idea final, la mejor, la única: el avión es sin duda el mayor coste de una compañía aérea, y por lo tanto, si eliminamos el avión de la ecuación de costes, la compañía tendrá unos enormes beneficios. Claro que entonces la gente no podrá ir a sus destinos volando, pero, para lo que pagan, bastante tienen con conseguir el billete. La gente está muy mal acostumbrada. Quieren pagar cuatro euros y viajar en un avión que cuesta cuarenta millones de euros. No señores, las cosas no funcionan así. Si usted quiere viajar en avión, pague una cantidad decente, o quédese en casa y no moleste. Sino, confórmese con el billete de Ryanair, y presuma con el mismo ante su familia y amigos.

Estas son algunas ideas, que el Escuadrón 69 cede gentilmente al Sr. Presidente de Ryanair. Felices vuelos, y siga usted proveyendo al mundo de la aeronáutica de estos momentos irrepetibles. Todos se lo agradeceremos.