A mi me mola lo del Yak. Llamádme rebelde.
Precisamente lo que me gusta es volar algo comparable a la vida real, me refiero a algo que queda cercano a lo que cualquiera puede experimentar. Es decir, avionetas, o incluso un Yak-52, que no es difícil de encontrar uno para volarlo en España. Así que el simu sirve de entrenamiento para la vida real (y viceversa). Además, mola poder comparar con conocimiento de causa el parecido entre el simu y la realidad.