El HMS Illustrious y los cuatro cables del apocalípsis

El HMS Illustrious incorporaba como aviones de caza y ataque el Fairey Swordfish y una versión marítima del Spitfire, conocida como Seafire. Este portaaviones es recordado entre otras cosas por la hazaña en la que los Swordfish atacaron el puerto de Tarento, hundiendo un portaaviones y obligando a otros dos a ser varados en la playa. Curiosamente, el puerto de Tarento es en muchos aspectos parecido al de Pearl Harbor, y los japoneses en parte se inspiraron en ese ataque para su ataque del siete de diciembre a la famosa base de la isla de Oahu, Hawaii. El Illustrious fue duramente bombardeado por aviones alemanes en enero de 1941, y no volvió a ser operativo hasta diciembre de ese mismo año. Posteriormente siguió combatiendo en el Mediterráneo, y también y principalmente en el Océano Ãndico defendiendo los territorios ingleses de aquella zona. Tras la guerra sirvió como portaaviones de entrenamiento y pruebas de apontaje de los primeros reactores. Pasó a la reserva en 1954 y fue desguazado en 1956.

El HMS Illustrious navega por aguas del Mediterráneo en 1940

En cuanto al cable de apontaje, muchos aficionados quizás no sepan que dicho cable no es uno, sino cuatro, colocados en la cubierta del portaaviones en la zona de apontaje. La razón de que haya cuatro cables es muy sencilla: se trata de que el avión coloque el gancho de apontaje en uno de los cables. Pero no en cualquiera, sino en el tercero. Veamos por qué.

Un F4U Corsair atrapa el tercer cable del USS Lexington

Todo piloto desea y debe colocar el avión en el lugar exacto del portaaviones, para que el gancho que incorpora la aeronave (nunca olvidemos bajar, además del tren, el gancho), se enganche con el cable de acero. Este cable permitirá frenar el avión de tal forma que se frene antes de llegar a la parte delantera de la cubierta. De hecho, cuando se toca la cubierta, es norma dar gases a tope para que, en caso de no haber enganchado el cable, se pueda volver al aire para intentarlo de nuevo.

En la imagen izquierda, se ve la parte superior de la cubierta, y la zona roja es dondeel piloto debe procurar tocar con el gancho de apontaje.En la imagen derecha, la misma visión vista de lado, con el ángulo aproximado que debe tenerel avión al apontar (ángulo muy inferior al que se usa en la actualidad con reactores)

Pero no hay un sólo cable, sino cuatro. Esto es así porque el piloto de esta forma tendrá más oportunidades de enganchar uno de los cuatro cables. Sí, pero esto no significa ni mucho menos que el piloto pueda elegir qué cable enganchar; debe engancharse, precisamente, en el tercero. ¿Por qué el tercero? Porque en el tercero el piloto está obligado a colocar el avión justo en la parte media, el punto donde las posibilidades de enganchar un cable sean mayores. Con esta norma, si el piloto se queda un poco corto, enganchará el segundo. Si se queda muy corto, enganchará el primero. Si aponta en el punto exacto donde debe apontar, enganchará el tercero. Y si se queda largo, enganchará el cuarto. Ni que decir tiene que si queda demasiado largo deberá volver a despegar para volver a apontar. Si se queda más corto del primer cable, es probable que el choque contra la parte trasera del portaaviones lo parta en trozos, como ocurrió en varias ocasiones. Por eso los cables no están justo al principio de la cubierta, en lo que aparentemente es una pérdida de espacio. No lo es, simplemente, se trata de asegurar que una aproximación corta no se convierta en un desastre. Recordemos además que el apontaje es considerado, técnicamente y a todos los efectos, una "colisión controlada", es decir, una situación por la cual se permite que un avión colisione con cubierta, tan violento es el contacto. Ni que decir tiene que esta maniobra es compleja y requiere de una gran precisión.

Todo esto lo vamos a poder vivir en Pacific Fighters, con lo que vamos a tener diversión asegurada. Además del oleaje, la dificultad de la aproximación, la poca visibilidad, y la nula guía electrónica, tendremos que apontar, si queremos hacerlo de forma perfecta, entre los cables tres y cuatro. Más vale ir estudiando la maniobra y practicándola en Forgotten Battles, imaginando que la pista estándar es la cubierta de un portaaviones, como se hacía en aquella época. Probadlo a hacerlo de noche, como ocurrirá con los aviones americanos que vuelvan de destruir el cuarto portaaviones japonés en la batalla de Midway. Va a hacer falta mucho valor.